Acuérdate
de mí, cuando estés lejos y necesites a alguien con quien platicar en tus
momentos más tristes, si la soledad toca a tu puerta y quieres una compañía
para evitar que de nuevo entre a tu vida, acuérdate de mí y de las tantas risas
que te regale cuando las lagrimas caían por tus mejillas, de esas locuras que
cometimos sin pensar en las consecuencias que nos traerían, acuérdate de mí, si
quieres volver a hablar como en aquellas noches interminables porque el día no
nos alcanzaba para hablar de ti, por si vuelves a leer esos libros que te
regale y encuentres dentro las notas que te escribí con un te quiero, acuérdate
de mí, por si a caso caminas por el parque donde nos conocimos y solo por
casualidad, volvemos a encontrarnos.
Acuérdate
de mí, si nadie entiende el modo en el que piensas y quieres solo a alguien que
te comprenda, si es que suena aquella canción que te dedique después de nuestro
primer beso, acuérdate de mí, si te cansas de buscarme en los ojos de alguien
más o por si sientes que enloqueces, que yo por ti perdí hasta la cabeza,
acuérdate de mí, cuando leas los pensamientos que te escribí y encuentres las
cartas que alguna vez no te di, acuérdate de mí, si tienes un secreto y
necesites un confidente a quien contárselo, si sientes escalofríos recorriendo
tu espalda y te ericen la piel como lo hacía yo al acariciarte, acuérdate de
mí, si quieres un hombro donde llorar o si quiera una mano que tomar.
Acuérdate
de mí si se te olvida quererte a ti misma, que aquí estaré para quererte.
Texto registrado bajo derechos de autor. Autor: Ryan A.